El Ganoderma Lucidum o también llamado Reishi, es uno de los descubrimientos más sorprendente que el mundo occidental ha encontrado en la milenaria medicina oriental. La palabra Reishi, en japonés significa “la yerba de la eternidad”, mientras Ling Zhi en chino representa “la hierba de los diez mil años”, algo que vendría a ser más o menos lo mismo. Con más de Cinco mil años de uso, la ganoderma en la herbología oriental se encuentra entre las llamadas hierbas superiores. El Ganoderma Lucidum, es un preciado nutriente utilizado desde hace más de 5000 años por los antiguos emperadores de la China quienes lo llamaron: ¨El milagroso rey de las hierbas¨
El Ganoderma es un sorprendente adaptógeno es decir, que “se puede adaptar al sistema del organismo humano que esté en deficiencia o no se encuentre en armonía”. Aprobado por la ciencia moderna. Ayuda al organismo a incrementar su energía, aumentando las defensas del sistema inmunológico, oxigena el cuerpo, provee antioxidantes naturales para combatir los radicales libres, causantes del envejecimiento prematuro.
Entre los componentes activos de la ganoderma se encuentra un polisacárido llamado letinan, que fortalece el sistema inmunológico, intensificando la función de las células T. Estas células se encargan de identificar microbios invasores y los atacan para combatir infecciones. Asimismo, previenen tumores, mejorando la circulación y eliminando los radicales libres dañados.
La experiencia clínica con el hongo ganoderma ha demostrado su valor como cardioprotector, antiviral, antioxidante, antiinflamatorio, antiartrítico, antialérgico, anti osteoporosis, antihipertensivo, antidiabético, antitumoral. También actúa como tonificante del sistema nervioso central, ayuda a mejorar las condiciones de la piel, aumenta el nivel de oxígeno en la sangre y promueve el PH alcalino.